Xosé Neira Vilas, un escritor «grande» para niños y niñas

El autor de «Memorias dun neno labrego» se acercó hasta Ribeira.

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Valentín García, Neira Vilas, as edís Vizcaya e Padín e Manuel Ruiz. Foto: La Voz de Galicia.«Lo escribí en Buenos Aires, a finales de 1960, en un bar. El camarero fue el primer lector que tuvo. Lo escribí en gallego y durante los 43 años que pasé en la emigración, no hablé otro idioma que no fuera ese», explicó el escritor Xosé Neira Vilas el pasado martes, en el auditorio de Ribeira.

Me alegro de estar en Ribeira, en este día soleado y con el mar de fondo. Yo, que lo conocí con 19 años.» Eso fue lo que dijo Neira Vilas durante la inauguración de la exposición Querido Balbino, 1961-2011. Cincuenta años de Memorias dun neno labrego. Lo acompañaban el Secretario Xeral de Política Lingüística, Valentín García; el alcalde, Manuel Ruiz, y las concejalas Elvira Pisos y Maricarmen Vizcaya. Unos y otras, delante de los niños y niñas que había sentadas, incidieron en el carácter de «grande» que tiene el autor, «uno de nuestros clásicos». El regidor tildó Memorias dun neno labrego de «nuestro Quijote» y Valentín García de «el Harry Potter gallego», la máxima expresión de los muchos Balbinos que hubo en Galicia.

El propio Neira Vilas le agradeció a la responsable de Normalización Lingüística, Alicia Padín, su esfuerzo para que la exposición llegara a Ribeira. Acompañado de su bastón, y de andar pausado, este autor gallego llamó a la atención por su capacidad de conversación. Firme, con muchos datos, sin perder el aliento. Hizo primer un repaso de todos los lugares por donde había pasado la muestra, que lleva peregrinando desde abril del 2011. «Balbino está en la literatura, está en esta exposición y está también en el teatro, gracias a Cándido Pazó, que lleva ya muchas representaciones de Memorias das memorias dun neno labrego, con mucho éxito», afirmó. Está también en piedra, pues Balbino tiene un monumento hecho por la Escola de Canteiros de Pontevedra y, el libro, incluso una calle. Algo novedoso.

La importancia del gallego
Neira Vilas insistió en que, del libro, no importaba el autor, sino el que había implicado. «Sé que en seis o siete lugares conocieron qué Galicia existía y tenía una lengua suya a través de esta obra, algo en lo cual yo insistía mucho en que quedara claro, y es ahí donde está su relevancia». Citó, una por una, a las personas responsables de las traducciones a, al menos, 17 idiomas. A continuación, firmó ejemplares de la obra. Muchos.

Neira Vilas dejó el auditorio a la una para acercarse al colegio de Frións, donde lo aguardaban docenas de niñas y niños, llegados también de los centros de Carreira y Aguiño. Lo agasajaron con una canción, en la presencia del director del colegio, Luís Teira, además de Valentín García y Maricarmen Vizcaya. «Galicia es la madre y es la patria. Mi principio y fin. Mi razón de vivir. Nuestra lengua es mi orgullo», les dijo al autor.

 

Fuente: La Voz de Galicia | Foto: La Voz de Galicia

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